Primer ataque del Comando Rulero: Entrevista a Carolina Moisés

Se encontraba el Comando Rulero a pleno como siempre en la peluquería, toca va, brushing viene, y no va que entra una mina con su nena pequeña y un codazo asesino se inscrutó en el brazo de una rulera... "esa no es la del discurso?....
Me parece que es la diputada Moisés! Mirá como tiene el pelo!
Preguntale, preguntale...."

Comando Rulero: Nosotras te conocimos (nosotras y muchos) por el discurso.

Carolina Moisés: Por el discurso de la Ley de medios.

CR: Y dijimos. Y ésta quién es?

CM: Jajaja, de dónde salió? Dónde estaba tapada?

CR: Claro, a mí me impresionó el discurso en sí, y la forma en que lo dijiste...Yo me quedé así frente al televisor, preguntando ¿Quién es esta mina? Eso, contanos quién sos...

CM: Yo quién soy… Bueno, a ver, yo soy de Jujuy, de una ciudad que se llama San Pedro, tiene 60.000 habitantes y es un pueblo, la verdad que es un pueblo…mucha mentalidad de pueblo del norte, esteee y llegué acá como diputada nacional porque de muy chiquita me metí en la política, de muy chiquita. Es cierto que mi papá ha sido intendente y siempre estuvo metido en todo, estuvo en la Juventud Peronista, estuvo preso. Y demás…

CR: De San Pedro?

CM: De San Pedro, sí, tres veces fue intendente en San Pedro. Entonces, cuando yo empecé a definir qué hacer, y qué estudiar, (que fue en la secundaria), fue su primer campaña a intendente, cuando yo estaba en quinto año, con lo cual, fue un estímulo para mí, porque al estar él en campaña, ahí me metí en todo: repartía volantes, todo eso, me militaba todo, y me enamoré de la relación con gente, del contacto con la gente. Entonces, tenía que decidir qué estudiar, y busqué todo lo que tenía relación…andaba yo por abogacía o periodismo, y con la experiencia de la campaña he dicho: “yo quiero hacer política. Y quiero estudiar para hacer política” porque veía, en Jujuy sobre todo, no había un vínculo, una formación profesional en la gente que hacía política… Sabía de la carrera de Ciencias Políticas. Entonces busqué qué había de Ciencias Políticas, y había en Córdoba, en Rosario y había en Buenos Aires. Y yo dije “me quiero ir a Buenos Aires porque Buenos Aires es lo único que me va a cambiar la cabeza. Porque Córdoba es un micromundo de los estudiantes jujeños en Córdoba. Rosario directamente ni conocía, nada, entonces pensé que lo único que me va a cambiar la cabeza, que me iba a abrir otras posibilidades es Buenos Aires. Y llegué acá con 17 años, sin conocer a nadie, no había venido nunca…

CR: En qué año?

CM: En el noventa y...dos. En marzo del noventa y dos

CR: Mirá, yo soy de Mendoza y vine también para acá en el noventa y dos.

CM: También llegaste acá ese mismo años? Mirá..

CR: Si…….Y cómo fue llegar acá? Bueno. yo tenía muchos amigos acá...

CM: Ah… No, para mí el primer año fue durísimo…fue el más difícil de todos.

CR: Por qué?

CM: Por qué… Por dos razones: yo llegué acá y no conocía a nadie, entonces entré a vivir a la casa de unos amigos de unos parientes de mi abuelo… transitoriamente, hasta que encontraba un departamento para compartir o una pensión… Las pensiones que iba encontrando no me gustaban: yo era muy libre, digamos, no tenía muchas limitaciones de mis padres, porque en un pueblo como ése tampoco podes hacer gran cosa. Entonces, las residencias de acá tenían un horario muy estricto , no podía salir de noche, y yo no quería nada de eso, y mis viejos tampoco. Hasta que encontré una señora, profesora de la universidad, que alquilaba una pieza para los chicos que venían del extranjero. Así que ahí me acomodé espléndido...una mina espectacular...

Pero lo más difícil era estar sola, acá, sin conocer a nadie, sin tener vínculos, sin tener relaciones y me chocó mucho la ciudad. Me pasó por encima la ciudad…esa es la primer razón. Porque yo venía de un pueblo donde todos me conocían, conocés a todo el mundo, charlás, te saludás en el ascensor….Yo me decía: "¿no saludar en el ascensor?" En el primer año, me parecía patético! /risas/ decía, "¿cómo vivís en el mismo edificio y no podés decir –Hola-?".

Bueno, esas cosas de la vida cotidiana, de las actitudes cotidianas de la ciudad, no las toleraba….Y me sentía totalmente sola y aislada y al mismo tiempo no me podía volver, porque yo me vine en contra de todos. O sea: mi viejo no quería, mis amigos no querían, mis parientes no querían, todo el mundo decía que estaba loca, me iba a venir a una ciudad tan grande, sola, con muchos miedos…. me presionaron mucho para que me quedara. Entonces yo decía “no me puedo volver”. Me pasé un par de meses medio encerrada, que no salía….pero bueno.
Lo pasé… "si paso ésto", me decía… Pero bueno, fue el primer año, fue lo peor de Buenos Aires… Y después me quedé encantada con la ciudad, porque desde ese año hasta acá, yo viví 5 años permanentemente hasta que me recibí, y de ahí fui y volví, fui y volví permanentemente.

CR: Y no buscaste contención en la militancia? Como habías militado en Jujuy…

CM: Sí…..sí, si, si,…yo ahí empecé a militar, porque yo allá en Jujuy arranqué con la Juventud Peronista en ese mismo año. Tenía 17 (en ese momento era una nena) Tenía 17 años y hubo una elección, pero yo ya estaba acá, entonces empecé a militar en la JP. Medio que acá y medio que allá…porque en Jujuy hacía años que no había elecciones de JP. Entonces medio que armamos un grupete y empezamos a joder en el 94, hasta que logramos que en esa interna del partido, nos metan a nosotros. Así que ahí en Jujuy medio que me fui, armamos un grupo, me relacioné con los otros grupos de JP que había en San Salvador, en Palpalá, en las otras ciudades, y armamos una sola lista, fuimos a la campaña….Fue espléndida esa campaña…porque éramos chicos jugando a hacer política….porque era la verdad. Y a la par acá, se empezó a armar la JP nacional. Estaba Menem en el gobierno en ese momento…y hubo un impulso ahí para levantar toda la JP de cada provincia, de cada distrito, entonces armaron justo un Congreso acá de Juventud Peronista de todas las provincias, y ahí empecé a militar acá………pero eso ya era en el 95, 96, pero los dos, tres primeros años, cursaba en una universidad privada, que era la Universidad de Belgrano, no se podía militar, no podía haber Centro de Estudiantes, entonces …Y aún en Ciencias Políticas, la visión de la carrera era que ellos forman politólogos, forman analistas políticos…….no forman políticos.

CR: Forman técnicos……teóricos

CM: Exactamente…..que para mí es un choque grande con varios profesores.

CR: Claro, la política es algo distinto……Estaban preparados para el ámbito privado

CM: Para el ámbito privado y para la administración pública como….gestión….. Gestión de políticas públicas. Y para el ámbito privado para las asesorías, las consultorías, todo eso, … y para la docencia y la investigación. Entonces yo he chocado mucho ahí porque yo hice mi carrera…..las dos paralelamente, por eso yo de tan joven soy diputada provincial, porque todos los años que yo estudié acá, militaba acá en la JP Nacional,……..en ese momento armaron la Subsecretaría Nacional de la juventud, armaron la Dirección de la Juventud, armaron desde el gobierno, ¿no? de ese momento…. Armaron el INCaP (INCaP hoy), que era el Instituto Nacional de Capacitación Política, armaron la Escuela de Gobierno, o sea, había un montón de herramientas buenísimas, que permitían que uno tenga acceso. Y a la par cada campaña que había en Jujuy yo me iba. De lo que sea…y como mi viejo en todas fue candidato o armaba candidatos, o participaba activamente, entonces yo, cada campaña empecé, en la del 91, repartiendo volantes, pegando afiches, y con la remerita, digamos, haciendo marketing y fui asumiendo más responsabilidades y aprendiendo elección tras elección. Entonces, en la del 93 ya me había tocado organizar yo, hacer de nexo con las reuniones en los barrios……

O sea, no las armaba yo, las armaban los punteros, la armaban los dirigentes, pero como que yo era el nexo con mi viejo para armarle la agenda. Y en la del 95, que mi papá fue candidato a gobernador, ahí yo me encargaba de organizar todos los actos. Los actos y las reuniones en cada lugar del interior. Entonces, armábamos una agenda y yo tenía que buscar el sonidista, el escenario, la prensa….todo eso en cada lugar que él iba. Entonces bueno, ahí, elección tras elección fui aprendiendo todo lo que era la parte de campaña, y mientras él era intendente también, cada vez que volvía, me involucraba en la gestíón del gobierno……Con los funcionarios, entonces le hacía como una evaluadora…Porque como yo aprendía acá todo lo de políticas públicas, lo de gestión local, volvía a Jujuy y me metía en la Municipalidad, y medio que le hacía una evaluación…con lo cual todos sus funcionarios me odiaban, porque…yo llegaba de afuera, 15 días y me metía en cada área, y venía con los conceptos de evaluación de la universidad que allá no existían,… Entonces yo tenía, me acuerdo, un ABC de cosas que tenía que evaluar, de preguntas, y hacía 2 columnas, entonces yo le hacía el diagnóstico del área…… Qué estaba bien, qué estaba mal, los recursos humanos, este………

CR: Y te daban bolilla o no?

CM: No, no no, nadie me daba bolilla

/Risas/…..

CR: Al cuete digamos todo!

CM: /Se ríe/ No! Hacía eso como una aplicación, como un ejercicio práctico de lo que aprendía

CR: Y después le servía a tu viejo……..?

CM: Y se lo dejaba al papá en el escritorio……y me iba

CR: Y él qué hacía?

CM: No, no hacía mucho /risa/…….Digamos /impostando la voz/ “sí, qué bien, que interesante, mirá qué bonito che!.. Sí tiene razón, tiene razón!

CR: “Mirá lo que hizo la nena……..”

CM: /Risa/ y después yo me volvía acá y nada, no hacía nada. …….Porque…… Después aprendí, la verdad, la teoría, es muy importante, a mí me sirvió mucho para el desarrollo de mi carrera, pero…

CR: Para entender sirve……..después para aplicar…… Es difícil……..

CM: Para aplicar es muy difícil

CR: Para entender es bárbaro, viste? Porque te dá las herramientas, pero para aplicar…….es otra cosa

CM: Para aplicar es imposible….

CR: Lo que pasa que la práctica, vista desde la teoría, si vos tenés incorporada la teoría, …….la práctica la mirás desde otro lugar a alguien que no tiene es teoría

CM: Totalmente, y te sirve como herramienta como para saber qué está mal y qué está bien, pero después acomodarlo y acomodar el deber ser a la realidad, o la realidad tratar de acercarla al deber ser es un ejercicio muy difícil en la política en una provincia como la nuestra, con tanta inestabilidad, y con tanta informalidad en la política, y tan… ortodoxa, digamos. En Jujuy la mentalidad es muy cerrada en muchos aspectos.

Y bueno. Todo eso lo aprendí cuando yo volví, o sea, siendo diputada provincial a los 22 años, fue una cosa…. inaudita, para Jujuy. A mi papá la dirigencia política le decía que estaba loco, que era muy joven, que me iba a quemar, que me iba a matar políticamente, no era el momento para que yo entre….¡Uh!, la dirigencia política decía de todo!. Los consultores y asesores de imagen me decían que era bueno, que era bueno porque era joven, y en ese momento como que a la gente le despertaba mucho interés, a la gente joven, y le generaba mucha confianza. Pero que no dijera mi edad. Porque si bien era evidente que era joven, era demasiado joven. Entonces que por ahí, no diga la edad… Me acuerdo eso, pero patético!…..

Y mi papá lo que hizo, cuando volví ya a Jujuy, me puso él de candidata de hecho,… él tenía que poner un candidato en la lista, Y ya en las 2 elecciones anteriores, había puesto candidatos que así como juraban…. se rajaban… Entonces dijo “No”… Hablamos…..y me dijo que “te quiero poner a vos”….. "Bueno! buenísimo" imaginate, 22 años, mis amigos, mis compañeros de la facultad….todos boyando, perdidos, no tenían laburo, no sabían por dónde, .. Entonces yo digo “La puta, la oportunidad que tengo, no la puedo dejar pasar”

Ahora yo, entré a la legislatura: mujer, tan joven, del interior, hija de.. O sea: Lo peor…/Risas//En ese momento la hija, para que no olvide que es mujer y madre, la reclama, la llama, pide atención, la llama mamá, que es mujer ella también!/

CR: Te faltaba ser negra!

CM: Me faltaba……si, no me falta mucho, pero…casi.. /risas/ Te juro…..Ustedes no saben lo que fue! 48 diputados: 47 y yo /carcajada/ El más joven tenía creo que 45 años tenía el más joven y de ahí…digamos,…. todos para arriba, digamos entre los 50 y los 70 el promedio, esteee…No me dejaban hablar…ni los compañeros, no? En el bloque!

El concepto era: “Esta chiquita no puede tener el mismo poder, el mismo rango que yo……era una cuestión de rango. Era una cuestión de honor, no sé, una cosa así……Y me la han hecho sentir horrible

CR: Eso ha cambiado, ahora?

CM: Sí…..dónde?

CR: Ahora se lo hacen a otras! /Carcajadas/

CM: No, no, no! /riendo/

CR: Lo que pasa que vos eras un caso excepcional

CM: Sí, yo era muy excepcional porque cumplía las 4 cosas….

Después, por ejemplo, entró un chango rejoven, pero bueno, era varón, era de la capital, y medio que el padrino era el gobernador en ese momento, y venía medio vinculado…. pero no era tan joven, tenía ya casi 30 años………

Después entró otro que tenía 29, pero empresario, tabacalero, varón. y no era “hijo de” sino que el chango sólo……..entonces, como que yo, cubría todo.

CR: Todos los males

CM: Sí,…Me la han hecho muy fea. Creo que sí, yo entré, y les rompí el esquema….. porque después entró gente joven, entró a participar y no era taaaaan grave. Porque yo después además armé la JP

CR: No te dejaban hablar y qué otras cosas?

CR: Claro, cómo te la bancaste?

CM: No me dejaban hablar…¿viste? la típica,.. no me decían “No hablés”, sino que me hablaban encima

CR: Te ignoraban….

CM: Sí, los odiaba, los odiaba……no me invitaban, no avisaban de las reuniones, eso es horrible, porque yo me enteraba después de que se habían juntado. Encima yo era de San Pedro, con lo cual, si yo me enteraba “están reunidos” no es que bajo y listo. No, me tenía que venir de San Pedro, entonces, bueno, me perdía un montón de cosas,…

En el recinto, cuando yo pedía la palabra, no me registraban, o sea, tenía que pelearme, levantarme e ir a hablar con el empleado que te habilita el micrófono y recién ahí me daban la palabra...

CR: La mujeres también?

CM: Las mujeres son peores. Las mujeres me trataron peor que los hombres. Siempre, ¿no? Eso, pasó el tiempo, y pasaron algunos condicionamientos míos, y hasta el día de hoy, la mayor envidia,… la mayor falta de respeto es de las mujeres…. Así que bueno, esa me la banqué peleándome con todo el mundo. Gritando.

Gritaba, peleaba, me enojaba……Era una pendeja soberbia. Porque pendeja era, y me obligaron por ejemplo, por ahí, a que yo me haga respetar con las herramientas que yo podía y que tenía! Entonces, si me tenía que putear, me puteaba.. Y si tenía que decirle cualquier cosa….para colmo tenía el respaldo de mi viejo. O sea, mi viejo es lo opuesto. Mi viejo tenía una confianza ciega en mí, sabía que…..Y mi viejo es bastante quilombero también, con lo cual, si yo hacía quilombo, el todavía me lo aplaudía.

Así que bueno, eso fue lo más difícil, después ya que se encaminó…

Igualmente, yo estuve 8 años de diputada provincial. Los primeros cuatro fue: aprender, ganarme un lugar, hacerme respetar. Conocer yo a la gente, conocer toda la provincia, caminar. Andaba……me conocía hasta el último pueblito. Andaba para todos lados, porque, también mi viejo era intendente, entonces tenía todas las herramientas…..Lo recalco ésto, porque ésto después cambió……Tenía herramientas, un municipio grande, donde tenía empleados, tenía camioneta, tenía cosas para repartir… a mi viejo le encanta hacer asistencia social con lo cual tenía un depósito de abastecimiento, donde, si la gente necesitaba un guardapolvo, no iban a comprar, o sea, iban, lo buscaban en el depósito y lo entregaban…… zapatillas, guardapolvos, útiles, leche…..todo ese tipo de cosas. Entonces yo, también, los primeros dos años, era un poco jugar a conocer la provincia y a dar cosas, porque….no fue un plan, se dio que me dice mi viejo: “Bueno, andate al norte porque me pidieron esas donaciones". Entonces te vas…al medio de la puna, un viaje de 5 horas, me iba yo con 3 camionetas cargadas de cosas. Y llegaba, después de renegar todo el viaje, porque el viaje demora, y todo lo demás, y llegaba a un lugar totalmente alucinante, espectacular imaginate, la puna es una cosa que te conecta con otra dimensión de la naturaleza ,… a una escuelita, con niñitos así /señala cerca del piso/ de todas las edades, que llega alguien y es como si te rodearan así, o sea, porque nunca va nadie…y las maestras, y el pueblo te recibían, hacían una fiesta como si fuera!….y bueno, más cuando le bajaba las cosas, los juguetes, las pelotas……Cuestión que yo habré tenido, dos, tres experiencias de esas y se fueron haciendo, te digo, cada 15 días salíamos. Andaba buscando adónde había que ir, adónde había una fiesta patronal, sobre todo, como yo soy del ramal, entonces como que es muy distinta la cultura de la gente del ramal de la provincia, de la gente del norte de la provincia….Entonces yo me enamoré del norte! Y me iba con 2, 3 camioneta Me decían: “Eh, che, Caro, nos vamos para allá” entonces cargaba la camioneta con cosas y nos íbamos.

Cuestión que los dos, tres primeros años fue conocer la provincia, que me conozcan a mí, generar ese vínculo de la gente, conocer los problemas tan distintos. La provincia tiene situaciones…digamos: geográficamente, climáticamente, culturalmente tiene 3 escenarios: la quebrada y la puna, las ciudades y la urbe que es toda la zona de capital, y los barrios de la vuelta, hasta Palpalá, por ahí, y todo lo que es el ramal. Y entonces, bueno, aprender de todo eso, y conocer fueron los primeros años.

Después mi viejo perdió la Muni. Fue durísimo eso. Entonces ahí yo maduré, recién…… Cuando él pierde la Muni, la única que queda con cargo soy yo, con una estructura enorme, desperdigada, la gente sin trabajo, toda la gente nuestra sin laburo, sin un mango, sin tener nada para repartir, cuando la gente se había acostumbrado a que repartamos, que cuando pedía tenía

CR: En qué año fue eso?

C: En el 2000

CR Qué año!

CM: Qué año….ahí viene el envión de los radicales a nivel nacional, perdemos todos los municipios en la provincia, en manos de los radicales. Y la gobernación no la perdemos por…/La hijita se cansa, empieza a llorar, Carolina le ofrece galletitas, juguetes, y vuelve a charlar/ Entonces ahí fue, a mí se me cayó….la cajita de cristal,………hasta ahí venía todo espléndido, era todo lindo, y era todo hermoso, y con lo chica que era, asumí todo con mucha responsabilidad, pero era, tenía un nivel de juego, digamos un nivel psicológico de juego, Ahora ahí…

CR: Ahí empezaron las verdaderas dificultades...

CM: Empezó la realidad de la política, para mí,………Ahí dejó de ser una práctica universitaria, dejar de ser un juego, una aventura, ahí recién empezó la realidad…… Y se me cayó encima toda junta, mi viejo…..fue durísima la relación con él, la frustración de él, haber perdido,--- la única que quedaba con cargo y con…./tose/ que la llamaban a militar, no sabés lo que era! Me invitaban a mí a los actos y no lo invitaban a él! O sea, era una cosa terrible…….

CR: Vos vivías con tu viejo en ese momento?

CM: Yo todo el tiempo viví sola. Yo llegué a Jujuy, viví unos meses con ellos y de ahí me fui a vivir sola, porque después de vivir tantos años…….

CR: Y después fuiste reelecta…..

CM: Fui reelecta. Y el segundo mandato, ahí fue cuando empecé a desarrollarme políticamente. …

En el próximo post, les contamos cómo fue el segundo período en Jujuy, la presidencia en la Comisión de Educación, y la Diputación Nacional.